Nuestras vidas se presentan cada vez más aceleradas, con mil compromisos que cumplir diariamente en relación a demandas económicas, laborales y sociales poco espacio suele quedar en nuestras agendas para los momentos de ocio y relajación. La conmemoración de este día no solo busca promover prácticas de relajación, sino también destacar los efectos positivos que estas prácticas pueden tener en nuestra salud física y mental.

El estrés crónico es uno de los principales problemas de salud en las sociedades modernas. Está relacionado con una amplia gama de trastornos, desde enfermedades cardiovasculares hasta trastornos del sueño y problemas de salud mental. Aquí es donde entra en juego la importancia de la relajación, que no es solo un lujo o un placer, sino que se posiciona como una necesidad fisiológica para mantener el bienestar.

La relajación puede tomar muchas formas: desde técnicas de respiración profunda y meditación hasta yoga, masajes o simplemente tomar un tiempo para desconectarse de las obligaciones diarias con plena conciencia. Independientemente del método, la relajación tiene un impacto directo y positivo en el cuerpo y la mente.

Durante los últimos años, se ha comenzado a hablar sobre la psiconeuroinmunoendocrinología (PNIE). Esta es una disciplina que estudia las complejas interacciones entre el sistema nervioso, el sistema inmunológico, el sistema endocrino y la mente. Es un campo que demuestra cómo nuestras emociones y pensamientos pueden influir directamente en nuestra salud física.

El estrés crónico puede traer serios problemas a nuestra salud física y mental.

Cuando estamos estresados, el cuerpo activa la respuesta de lucha o huida (fight or flight), un mecanismo de supervivencia que involucra la liberación de hormonas como el cortisol y la adrenalina. Estas hormonas preparan al cuerpo para enfrentar una amenaza, pero si se activan de forma constante debido al estrés crónico, pueden tener efectos perjudiciales en la salud, como el debilitamiento del sistema inmunológico, el aumento de la presión arterial y la promoción de procesos inflamatorios.

Las técnicas de relajación, por otro lado, activan la respuesta de relajación (relaxation response), un estado de descanso profundo que contrarresta los efectos del estrés. Durante la relajación, el cuerpo disminuye la producción de cortisol y adrenalina, lo que permite la recuperación y la reparación de los tejidos, mejora la función inmunológica y estabiliza la producción de hormonas.

Diversos estudios en el campo de la PNIE han demostrado que practicar regularmente ejercicios de relajación pueden:

• Reducir la inflamación: La inflamación crónica está vinculada a numerosas enfermedades, incluyendo la diabetes y el cáncer. La relajación ayuda a reducir los marcadores inflamatorios en el cuerpo otorgando una sensación de mayor bienestar y colaborando al proceso de desinflamación celular.



• Fortalecer el sistema inmunológico: Al disminuir el estrés y la ansiedad, el cuerpo es más capaz de defenderse contra infecciones y enfermedades.



• Equilibrar las hormonas: La reducción del estrés disminuye los niveles de cortisol y favorece la producción de hormonas que promueven el bienestar, como la serotonina y la oxitocina.



• Mejorar la salud mental: La relajación ayuda a reducir los síntomas de ansiedad y depresión, promoviendo un estado de ánimo más estable y positivo.

Cada día es una gran oportunidad para incorporar hábitos que favorezcan nuestra salud.

Podemos decir entonces que el Día Mundial de la Relajación es una excelente oportunidad para incorporar prácticas de relajación en nuestra rutina diaria. Aquí dejamos algunas sugerencias para celebrar este día:

• Realizar ejercicios de meditación: Incluso unos pocos minutos de meditación pueden tener un impacto significativo en la reducción del estrés. Actualmente diversas plataformas ofrecen la posibilidad de buscar ejercicios de meditación guiada, que pueden ayudarte a incorporar esta práctica a tu vida



• Practicar ejercicios de respiración: La respiración profunda y consciente puede ayudar a activar la respuesta de relajación del cuerpo.



• Regalate un masaje: Los masajes no solo alivian la tensión muscular, sino que también promueven la liberación de endorfinas, las hormonas de la felicidad.



• Desconectate del mundo digital: Tomarse un tiempo lejos de las pantallas y las redes sociales puede ser increíblemente refrescante para la mente.



• Salí a la naturaleza: Pasar tiempo en la naturaleza ha demostrado reducir los niveles de cortisol y mejorar la sensación general de bienestar.

El Día Mundial de la Relajación no es solo un recordatorio para tomarse un descanso, sino una invitación a hacer de la relajación una parte fundamental de nuestro estilo de vida. Entender la conexión entre la mente y el cuerpo a través de la PNIE nos permite apreciar cuán crucial es cuidar de nuestro bienestar mental para mantener la salud en general. En definitiva, la relajación es una herramienta poderosa que, cuando se practica con regularidad, puede transformar nuestra salud y nuestra vida. ¡Aprovechemos este día para empezar a darle la importancia que merece!