Las superceldas de baja precipitación suelen ser las menos usuales y de menor tamaño, pero no por eso debemos subestimarlas. Se forman en condiciones de buena cortante como las otras, pero bajo menor humedad. Por este motivo no precipitan con la fuerza de las superceldas de alta precipitación.
Supercelda de baja precipitación en EE.UU.
Cuando las condiciones de cortante son muy intensas y la supercelda adquiere un rápido crecimiento, podemos observar una forma inclinada y “retorcida” (por la rotación de su mesociclón) en su estructura como vemos en la foto.
Su tiempo de vida suele ser menor a las superceldas AP porque muchas veces se “agotan” antes de madurar. De todas formas pueden generar eventos severos en su ciclo de vida.
Se observan junto a líneas secas (líneas que separan una masa de aire cálido y húmedo de una masa de aire seco). En los ecos de radares raramente se encuentra un gancho (en procesamientos PPI) e incluso por el pequeño tamaño posiblemente no se vean como un núcleo lleno en la imagen de radar, mas aún si están en un mediano o largo rango. Por lo tanto, el radar probablemente subestime su intensidad.
Supercelda de baja precipitación en Jovita, Córdoba
Suelen producir granizo grande, nubes embudo, nubes pared, y ocasionalmente tornados débiles o incluso fuertes. Estos eventos severos generalmente ocurren en la parte trasera (en Argentina se ubica generalmente al noroeste u oeste de la celda).
La foto de la derecha corresponde a una supercelda BP en Jovita, Córdoba (publicada por Alejandro Moreschi), ocurrida en un evento severo de la temporada de tormentas 2012-13.
