En GBA los acumulados fueron menores (entre 60 y 100 milímetros) pero también con graves consecuencias.

Casas y edificios públicos destruidos por las inundaciones, calles y autopistas completamente inundadas, autos apilados y chocados son además algunas de las consecuencias materiales. Este temporal estableció récords históricos de precipitación para abril, ya que se superaron los 142 mm del 8 de abril de 1989 en Capital Federal.

Si bien ayer a la noche avisamos del comienzo de las tormentas en Capital y habíamos emitido un alerta, no esperábamos semejantes valores de precipitación. Pero del lado oficial, el SMN ni siquiera había emitido un alerta para Capital y GBA. En cambio, emitimos un aviso inmediato por tormentas una hora antes de lo sucedido en La Plata, aclarando la probabilidad de sufrir nuevas inundaciones.

Como si los grandes acumulados no bastaran, el centro de baja presión que provocó las inundaciones además generó inesperados eventos de tiempo severo: Se registraron 4 tornados y/o nubes embudo en distintos puntos de Buenos Aires, Entre Ríos y Uruguay.

Al aproximarse el núcleo de tormenta que ocasionó las inundaciones en La Plata, se pudo observar un tornado en Ensenada (en las cercanías) alrededor de las 4 de la tarde, como vemos en la imagen:



La cantidad de agua que cayó en La Plata es récord para nuestro país: No se posee registros de acumulados tan importantes en un período tan breve. Las condiciones atmosféricas previas (un sistema de baja presión de lento movimiento y el transporte de humedad desde el río) generaban un escenario donde las inundaciones repentinas en forma local eran posibles, aunque nadie podía prever semejante desenlace.