Las bolsas de plástico se introdujeron en la década de 1960 y rápidamente se convirtieron en una parte integral de la vida cotidiana debido a su conveniencia, practicidad y bajo costo. Sin embargo, su uso masivo ha tenido consecuencias devastadoras para el medio ambiente. Se estima que cada año se utilizan en el mundo entre 1 y 5 billones de bolsas de plástico, y muchas de ellas terminan en vertederos, océanos y otros ecosistemas.Según Greenpeace, la producción mundial de plásticos se acercará en 2020 a los 500 millones de toneladas.

Estas bolsas tardan cientos de años en descomponerse, y durante ese tiempo, se fragmentan en microplásticos que contaminan el suelo y el agua, afectando a la fauna y la flora. Animales marinos, como tortugas, aves y peces, confunden estos plásticos con alimentos, lo que puede resultar en su muerte por ingestión o estrangulamiento.

El Día Internacional Libre de Bolsas de Plástico se estableció para sensibilizar al público sobre estos problemas y promover alternativas sostenibles. Esta iniciativa comenzó en 2009, impulsada por la organización sin fines de lucro Zero Waste Europe. Desde entonces, la celebración ha ganado reconocimiento mundial y ha sido adoptada por numerosas organizaciones y gobiernos.

Esta conmemoración es una oportunidad para aumentar la conciencia pública sobre los problemas ambientales causados por el plástico.

Diversos países y ciudades han tomado medidas para reducir el uso de bolsas de plástico. Se han implementado prohibiciones en Francia e Italia, países como Reino Unido, Portugal y Suecia aplican impuestos sobre su uso y en muchos otros países se ven cada vez más campañas de sensibilización. Por ejemplo, en España, muchas comunidades autónomas han introducido regulaciones para limitar la distribución gratuita de bolsas de plástico en los comercios, promoviendo el uso de bolsas reutilizables.

Para contribuir a la reducción del uso de bolsas de plástico, es fundamental adoptar alternativas más sostenibles, y para ello es necesario que todos los sectores de la sociedad se impliquen en esta tarea. Muchas veces, no nos damos cuenta de la cantidad de bolsas que utilizamos cuando hacemos una compra, pero esta no es la única opción que tenemos para realizar esa actividad, modificando pequeños hábitos, podemos contribuir mucho con el planeta.

Bolsas reciclables, compostables, carritos de compra, grandes aliados a la hora de reducir el uso de bolsas de plástico.

• Bolsas reutilizables. Se fabrican con materiales muy duraderos como el algodón, yute o poliéster y pueden ser utilizadas muchas veces.


• Bolsas Compostables. Son hechas de materiales biodegradables, como almidón de maíz y se descomponen de manera más rápida y segura en el medio ambiente.


• Carritos para hacer compras. son una alternativa práctica y ecológica para transportar productos, eliminando la necesidad de bolsas desechables.


• Reciclaje y Reutilización. Fomentar el reciclaje y la reutilización de bolsas de plástico existentes también puede ayudar a reducir su impacto ambiental.

Todos podemos aportar algo a esta causa y contribuir al esfuerzo global para reducir el uso de bolsas de plástico. Es importante que siempre tengas a mano tu propia bolsa reutilizable, no aceptes bolsas cuando realmente no son necesarias y de utilizarlas intentar que sean compostables.

El Día Internacional Libre de Bolsas de Plástico es un recordatorio anual de la importancia de reducir nuestro consumo de plástico y adoptar hábitos más sostenibles. Con pequeños cambios en nuestro día a día, podemos contribuir a un futuro más limpio y saludable para nuestro planeta y todos los seres que habitan en él.