El inicio del invierno en el hemisferio sur es un fenómeno astronómico y meteorológico de gran importancia. Este evento marca no solo un cambio en las condiciones climáticas, sino también un momento clave en el ciclo estacional de la Tierra. Exploremos juntos la explicación científica detrás del inicio del invierno, su impacto en el clima y la biodiversidad, y las variaciones anuales que pueden afectar su comienzo.
El comienzo del invierno en el hemisferio sur del planeta está determinado por el solsticio de junio, que ocurre alrededor del 21 de junio cada año, en esta oportunidad el solsticio se llevará a cabo el día de hoy, jueves 20 de Junio, a las 17h 51min (horario calculado por el Servicio de Hidrografía Naval, tomando como referencia el huso horario argentino), es decir que este año tendremos en esta región una coincidencia maravillosa: nuestro invierno comenzará durante el atardecer.
Durante el solsticio de junio, el Polo Sur está más alejado del Sol, resultando en el día más corto y la noche más larga del año en esta región. Este evento marca el inicio oficial del invierno según el calendario astronómico. La responsable de la variación estacional es nada más y nada menos que la inclinación axial de la Tierra, de aproximadamente 23.5 grados. Durante el solsticio de junio, el hemisferio sur se inclina más lejos del Sol, reduciendo la cantidad de radiación solar que recibe. Por eso percibimos una disminución en las temperaturas y el inicio del invierno.
El invierno 2024 comienza durante el atardecer del 20 de Junio.
En el hemisferio sur, el invierno se caracteriza por temperaturas más bajas, variaciones en los patrones de viento y cambios en las precipitaciones. En regiones como el sur de América del Sur, Australia y Nueva Zelanda, trae consigo condiciones más frías y húmedas en algunas áreas y más secas en otras.
En América del Sur, por ejemplo, el invierno puede significar un aumento en las lluvias en la región sur de Brasil y Uruguay, mientras que en Argentina se experimentan temperaturas más frías y precipitaciones en forma de nieve en las zonas montañosas. En Australia, el sur del país enfrenta temperaturas más frías y lluvias, especialmente en el suroeste.
Solsticios y equinoccios, marcando puntos en el año relacionados con la posición del Sol en el cielo y la duración del día y la noche.
Un solsticio es un evento astronómico que ocurre dos veces al año, cuando el Sol alcanza su máxima o mínima altura con respecto al ecuador celeste, marcando así el día más largo o más corto del año. Los solsticios están directamente relacionados con la inclinación axial de la Tierra y su órbita alrededor del Sol y no con la distancia de la Tierra y el Sol como muchas personas creen, según el Observatorio Astronómico de Córdoba. Estos ocurren dos veces al año: solsticio de verano y solsticio de invierno
Un equinoccio ocurre cuando el Sol cruza el ecuador celeste, resultando en casi igual duración del día y la noche en todo el mundo. Al igual que los solsticios, ocurren dos veces al año: equinoccio de primavera y equinoccio de otoño. Durante un equinoccio, el día y la noche tienen aproximadamente la misma duración en todas partes del mundo, ya que el sol se encuentra directamente sobre el ecuador celeste.
Ambos eventos son fundamentales para comprender las estaciones y el comportamiento del Sol a lo largo del año, influenciando tanto el clima como las actividades que realizamos cotidianamente.