En la madrugada del sábado, una misteriosa formación de colores blanquecinos y azulados fue avistada en el cielo nocturno de Alaska. El avistamiento fue realizado por un grupo de observadores de auroras boreales, quienes se encontraban admirando las bandas verdes de luz. Las imágenes del fenómeno se volvieron virales en las redes sociales, dando lugar a diversas teorías sobre su origen.
El Instituto Geofísico de Alaska logró capturar la formación en una cámara panorámica y difundió un video en cámara rápida que se hizo popular rápidamente. "Esta espiral ha creado una especie de tormenta en internet", declaró Don Hampton, físico espacial.
A pesar de las especulaciones sobre una posible invasión extraterrestre o la aparición de un portal al otro lado del universo, la explicación resultó ser mucho más sencilla. La formación era en realidad el exceso de combustible expulsado por un cohete de SpaceX que había sido lanzado desde California unas horas antes. "A veces, los cohetes necesitan deshacerse del combustible que no han utilizado", explicó Hampton. "Cuando lo hacen a gran altura, el combustible se convierte en hielo".
Impactantes imágenes del espiral sobre el cielo de Alaska (redes sociales).
Por otro lado, las auroras boreales son un fenómeno natural de luminiscencia que se presenta en el cielo nocturno, principalmente en las regiones polares. Este remolino artificial, por el contrario, es simplemente vapor de agua reflejando la luz solar. Aunque resulte fascinante, lamentablemente es una muestra más de cómo empresas como SpaceX están contribuyendo a la contaminación atmosférica y lumínica.
Auroras Boreales en el cielo de Alaska (redes sociales).
Mientras que la formación en espiral que apareció en el cielo de Alaska puede parecer impresionante, en realidad es solo vapor de agua que refleja la luz solar. Sin embargo, es un recordatorio de cómo empresas como SpaceX están contribuyendo al aumento de la contaminación atmosférica y lumínica.
Impactantes imágenes del espiral sobre el cielo de Alaska (redes sociales).